Christchurch

Desde Taupo le pegamos derechito a la Isla Sur. Cinco horas manejando hasta Wellington (la capital de NZ), ferry hasta Picton y cuatro horas arriba del auto para llegar a Christchurch.

Este fue un muy lindo viaje. Uno de los más lindos de esta aventura que ya lleva ¡¡¡siete meses!!!. El camino de Taupo a Wellington es todo un trayecto de curvas con paisajes que varían desde espesa vegetación al lado de la ruta….hasta campo y ovejas por todos lados.

Llegamos a Wellington pero ni pisamos la ciudad. Fuimos directo a la estación del ferry y por $203, luego de tres horas, cruzamos junto a nuestra “nave” a la Isla Sur.

El “Interislander” es un barco gigante construido en Finlandia, que todos lo días hace el recorrido hasta Picton. Entran más de 1000 pasajeros y tiene de todo…..hasta juegos para niños.

Llegamos a Picton y dormimos en el “Interatlantic Hostel” ($17 c/u)….sin dudas el peor lugar donde paramos hasta el momento. Malísimo, pero fue solo una noche.

Nos levantamos bien tempranito y empezamos nuestro viaje por la Isla Sur. La ruta es espectacular, de un lado el Océano Pacifico y del otro las montañas llenas de pino, y por supuesto…..ovejas. El cambio de paisaje de Isla Norte a Sur es instantáneo, porque de los cuatro millones de habitantes que tiene NZ, apenas el 25% vive en el Sur.

El destino era Christchurch, pero en el camino paramos varias veces porque valía la pena apreciar los paisajes. Simplemente, sentarnos al costado de la ruta a ver el mar y dejar correr el tiempo fue gozar del lugar donde estábamos.Mates en una bahía con la compañía de las gaviotas.

Otra de las paradas fue Kaikura….la ciudad donde se pueden ver las mismas ballenas que en Puerto Madryn. Y lo mejor fue en Ohau Point, donde, desde la ruta, esta el avistaje de Leones Marinos. Finalmente, sin apuros, llegamos a Christchurch. La ciudad más grande e importante de la Isla Sur (350,000 habitantes). Una localidad con un estilo completamente europeo. Es más…muchos la describen como la ciudad más inglesa del país.

Mucho de razón tienen, ya que la arquitectura victoriana y gótica es la que predomina es los viejos edificios, la catedral es puramente del estilo ingles y las principales calles de la ciudad tienen nombres de ciudades inglesas !!!: Gloucester St., Manchester St., Hereford St., Worcester St., Derby St., Victoria St., Durham St., etc.La catedral es el icono y el corazón de Christchurch. Construida es 1881, mide 63mts y es la iglesia más visitada de NZ. Sin embargo, leímos que están con problemas económicos, ya que solo abrirla les cuesta $3,500 kiwis por día. Así que luego de hacer la señal de la cruz, hay que dejar la moneditas a modo de donación. A pocos metros de la catedral, esta este “cono de helado”, que no entendemos para que sirve pero todos los turistas nos sacamos fotos.Ajedrez gigante en plena plaza.El tranvía todavía existe !!! Construido en 1905, por estos días solo hace un recorrido turístico de 2,5km. No nos subimos porque nos pareció un poco caro $12,50.“Puente de la memoria” en honor a los caídos en una de las tantas guerras inglesas que se unió NZ.Luego de recorrer la catedral, seguimos caminando hasta el “Arts Centre”, la antigua Universidad de Canterbury, que fue remodelada y transformada en un centro de arte, lleno de locales de pinturas, esculturas, cuadros y artesanías.

Además tiene un paseo de comida internacional (Popi comió Thai food y yo un Lamb Kebab libanés) y espectáculos callejeros.
También tuvimos tiempo de conocer el museo (es gratis).Y terminamos el día recorriendo el inmenso Parque Botánico. Treinta hectáreas de plantas y árboles autóctonos de todo el mundo.El Avon River, cruza la ciudad y el parque por el medio y se lo puede navegar en góndolas. ¿De dónde es este cactus?....Si adivinaste, de Argentina !!!

En Christchurch nos quedamos tres días (sábado a lunes), para hacer la Warrant of Fitness (WOF). Es el control semestral obligatorio para TODOS los autos. De esta manera, el gobierno se asegura que el parque automotor este capacitado para circular por calles y rutas.

Cada auto tiene una oblea pegada en el parabrisas indicando cuando se le vence la WOF. Cuando esta a punto de caducar, hay que pasar por un mecánico autorizado, que revisa más de 100 aspectos del auto. Prácticamente todo (luces, frenos, alineación, gomas, cinturones de seguridad, caja de cambios, puertas, etc.).

Luego del chequeo, carga todos los datos del auto en la web (algo importante a la hora de comprar) y renueva la WOF por seis meses o rechaza.

La nuestra caducaba en junio, así que pasamos por el mecánico y nos reboto la WOF por dos pequeñeces !!! Nos faltaba el plástico rojo del “stop” Uno de los cinturones de seguridad estaba apenitas deshilachado.

De esta manera, el lunes a primera hora fuimos a un desarmadero “legal” y por $80 nos vendieron e instalaron las partes. Volvimos al mecánico y ahora si nos dio el OK para que nuestra querida “nave” circule sin problemas hasta Diciembre.