Próximo destino

sábado, 3 de octubre de 2009

Singapur - Día 8

Dejamos la cálida Malacca (Melaka) a las 9:00 hs. para tomar un colectivo de larga distancia hacia Singapur, un país que nos habían anticipado como futurístico y caro.


El viaje nos costó apenas $25 Rm. (U$ 7,3) y luego de cuatro horas ya habíamos pasado por el moderno edificio de migraciones.


De Melaka a Singapur por la Autopista E2


En Singapur nos encontramos con el cambio mas caro del Sudeste Asiático
 1 U$ = 1,4 singapore dollar.

Pero a partir de este pequeño país de apenas 40 km. x 43 km. le agregamos una novedad a este viaje exótico. Desde ahora, nos sumamos a la red de CouchSurfing.



¿Qué es esto se preguntarán?

CouchSurfing es un servicio de hospitalidad online. Una página donde te registras, armas tu perfil y simplemente buscas usuarios, del lugar del mundo que quieras y que acepten "huéspedes".

Esto es TOTALMENTE GRATUITO !!! y la idea es conocer gente de otra parte del mundo, intercambiar cultura y hacer nuevos amigos. CouchSurfing no solo es un medio de alojamiento (todo lo contrario), se trata de una forma totalmente nueva de viajar. Sin dudas, tras nuestro viaje por Singapur vimos y aprendimos mucho más que si solo nos hubiéramos quedado en un cuarto del hostel.

Llegamos 13:40 a Singapur y llamamos a Ronald....nuestro primer couchsurfer y coordinamos en encontrarnos en el Wheelock Place uno de los tannnnntos malls que tiene esta ciudad estado. 


Finalmente, luego de un par de combinaciones de subte llegamos y conocimos a Ronald un pibe macanudisimo, dinámico, con mucha energía que hizo muy grata nuestra estadía en Singapur.


Ronald, nos pasó a buscar en la camioneta Honda de su familia y los cuatro juntos nos fuimos a recorrer un poco el centro...en especial Orchard Rd. la calle turística por excelencia repleta de gente, shoppings y locales.


Los rascacielos de Singapur...un país construido para arriba,



A nuestra caminata se sumó Leonard, un amigo de Ronald...y así pasamos buena parte de la tarde caminando, en especial por los shopping subterráneos que están todos conectados entre si.



Los famosos durian..."The King of Fruits" que conocimos en Brunei...encapsulados por su fuerte olor.


Paramos a masticar algo...y los chicos nos recomendaron esta merienda.


Un postre gelatinoso, oriundo de china acompañado de un pan, similar a las riquísimas torta fritas argentinas.


El postre horrible....el pan delicioso.

El paseo, a medida que pasaba el tiempo, se puso más interesante, ya que Ronald y Leonard tenían mucha onda, nos hacían preguntas sobre Argentina y contaban los pros y contra de su país.

Por ejemplo, ellos nos recalcaban todo el tiempo, que los jóvenes singapurenses "no tienen vida"....su único objetivo es ir la Universidad y conseguir un buen trabajo que les de dinero......viajar y conocer gente de otros lugares es una rareza.


Continuamos hacia LASALLE College of the Arts Centre  en 1 McNally St.


Como dice su nombre, un instituto de educación dedicado al arte, el diseño y la música que fue reconstruido en 2007 y esta muy bueno para conocer. 



Próximo paseo...el barrio de "Little India" a lo largo de Serangoon Road. 

Este barrio hindú tiene la característica de ser prácticamente exclusivo de hombres !!! Esto se debe a que la población de la etnia tamil (Sur de India) son contratados por dos o tres años para trabajar en la construcción. Los trabajadores viajan solos a Singapur....sin su familia y todos viven en el mismo barrio.


Así que cuando ven una mujer hermosa, como la de esta foto.....le clavan la mirada todo el tiemmmmmpo !!!


Otro amigo de Ronald se sumó al grupo, Jesse, para ir a cenar alrededor de las 19:00 a un típico "Food Court". A todo esto...ya nos preguntábamos....y dónde iremos a dormir ? Ja Ja.


Los chicos se encargaron de pedir todo...para que comamos una variada comida local. Unos genios. 

La costumbre no es pedir un plato individual, como estamos acostumbrados, sino que se eligen varios platos y comparten entre toda la mesa.


Omelette de ostras....DE-LI-CIO-SO.


Por supuesto que no existen los cubiertos....y no queda otra que improvisar y aprender a usar los palitos.


El largo día no paró y continuó por el barrio turco = la zona roja de Singapur. Fuimos a un bar para fumar la "pipa turca" o  hookah, narghile, narghila, shisha, sheesha, water-pipe.







Shisha sabor frutilla...


Para terminar este gran día fuimos a conocer la zona de Clarke Quay....un lugar similar al Puerto Madero de Buenos Aires.



Clarke Quay, es la histórica zona portuaria en la ribera del río Singapur. Hasta los 70´ era una de los lugares exclusivos de carga y descarga de mercadería, por lo que el río se contaminó enormemente.

Recién en 1977, el gobierno tomó cartas en el asunto...y luego de 10 años de trabajos continuos lograron limpiarlo. Así la zona, cambio su fisonomía por completo. Comenzó su desarrollo económico/turístico hasta convertirse hoy por hoy en el lugar TOP de la ciudad.


Restaurants, bares, discos, locales, luces y un perfecto orden decoran a Clarke Quay. Un lugar ideal para terminar la noche.



Esa noche, jugaban Chelsea vs. Liverpool y juro que las TVs de tooooooodos los bares tenian puesto ese partido. Es inaudito la penetración que tiene la Premier League en el Sudeste Asiático.




Al fin llegamos a casa de Ronald, quien vive con su padres, hermanos y abuela. Era muy tarde, así que sin hacer ruido entramos y nos hospedamos en un cuarto los tres solos con unos colchones en el piso. 

100% positiva nuestra primera experiencia de Couch Surfing.

viernes, 2 de octubre de 2009

Malacca - Día 7

Descansamos mucho = dormimos hasta tarde.
Así que nos levantamos con ganas de un rico desayuno.

Sin querer mientras caminabamos por la angosta callecita Jalan Tukang Besi, nos topamos con Zheng He Tea House y entramos para degustar un delicioso té chino.
Zheng He, no es solo una casa de té, sino también un pequeño Museo con caligrafías chinas en la paredes y un campanón de unos cuantos siglos atrás en el centro de la casa.

Esta casa de té, es un lugar aireado, con techos de madera y un patio central donde reina la tranquilidad.

Aquí, Ms. Pak, la anfitriona, nos atendió de primera. No solo se sentó con nosotros a tomar el té, sino que nos dio una catedra de como prepararlo y tomarlo. Sinceramente nunca imaginos que recibiríamos tamaña atención !!!
Primero calento, con agua caliente (nunca hirviendo), la bandeja, tetera y pocillos, luego nos mostró las hojas del té negro que probamos.

A medida que Ms. Pak nos enseñaba cada detalle, obviamente la charla giro para otros lados. Desde nuestro viaje a NZ, la vida en Arg. y Malasia hasta como llegó de China a Malacca, etc...

Una vez que se terminó la tetera, suponíamos que ahí terminaba nuestra estadía. Pero no....!!! Ms. Pak abrío el te gris y a los 20" minutos llegó el turno del té verde.
Todo este gran servicio, atenció y cordialidad por solo $20 Rm = U$ 6. Extramadamente barato.

Pero más allá del precio, el momento que pasamos fue genial. Poder compartir más de una hora con Ms. Pak fue un momento que disfrutamos.
Así que va, a full, mi recomendación para que se encanten con Zheng He Tea House.

La lluvia se hizo presente, pero poco nos importó ya que seguimos descubriendo recovecos de Malacca.
Esta vez nos metimos en un templo Chino, que justo estaba lleno de gente porque ese mismo día se celebraba el Moon Festival o Zhongqiu Festival.

Esta es una de las festividades más importantes para la comunidad china, junto al Año Nuevo. Es por ello, que este día es feriado nacional.
Se festeja el 15º día del octavo mes chino (2010: 22 Sept. - 2011: 12 Sep. - 2012 30Sept.) y es el día que la luna supuestamente esta más redonda que nunca.

De esta manera, en honor a la luna, las mujeres de cada casa preparan cientas de pequeñas tortas, de diversos sabores, conocidas como "mooncakes" para convidar a vecinos y amigos.
Todo el templo estaba impregnado de olor a sahumerio / incienso. La gente rezaba con varios en la mano que los iba dejando uno a uno delante de diferentes figuras.

Pasado el mediodía, llegaron las ganas de ir a comer y probar nuevos sabores asiáticos. El destino que encaramos fue el barrio Little India, donde descubrimos el Restoran Selvam.
Esta fue otra nueva experiencia que vivimos, muy diferente a los que estamos acostumbrados a nuestro país.
Los platos eran hojas de banana, buenísima idea !!! Acompañadas de una galleta con sabor a calamar.
Luego apareció el mozo y sin preguntar nos sirvió, tres salsas: una en base a pepinos, otra de zapallitos y sambar (una mezcla de vegetales con curry) muy muy muy picante.
El mozo, siguió sin hablarnos, pero ahora llegó con una fuente llena de arroz.
Finalmente, apareció un segundo mozo, muy simpático que nos recibió y dio la bienvenida, ofreció agua, gaseosas y la posibilidad de elegir una plato extra al arroz y las salsas: Pescado, pollo, beef o calamares.
Otra curiosidad es que los locales comen con la mano !!! Ni siquiera usa los clásicos palitos. Claro que para nosotros, los occidentales, tienen tenedores.
Aquí tiene la foto de una tipica local, almorzando arroz + salsa con la mano. Extraño no ?
Para rematar la comida, el resto se llenó y una pareja de finladeses (a la izq. de la foto) nos preguntó si se podían sentar en nuestra misma mesa. Después se sumaron un australiano y un francés (lo dos de la derecha) y más tarde se agregó otro francés (al lado de Nachito).

Así se armó en pleno Malacca, en un resto Hindú, un mesa multinacional !!!

El precio de nuestro almuerzo $22 Rm = U$ 6,5
Salimos a caminar, bordeando el río. Lindo paseo todo renovado, sirve para ver otra cara de la ciudad, pero igual de interesante.
Más paseos por el interior de la ciudad, donde aprovechamos para sacar los pasajes de colectivo para viajar al día siguiente hacia Singapur.
La iglesia de San Xavier
Las moto-taxi, tienen un carrito, demasiaaaaaaaaaado decorado, para transportar a dos personas por los puntos turísticos. Además cuentan con un buffer y ponen la música a todo volumen.
Fin del día en Voyage Bar, con muy buena música, charla laaarrrga con Alejandro (el franco-suizo) y varias Carslbergs ($8,5 Rm) para acompañar una noche perfecta.
Mooncake cortersía de la casa.